Sinopsis: George Clooney es Matt King, un abogado de Hawaii que deberá restablecer la relación con sus dos hijas tras quedar su mujer en coma en un accidente.

Sí, ya sé, es un tanto sucinta, pero tampoco es plan de destripar la película en el primer párrafo, ¿no? Tras el tráiler sí habrá algún espoiler. Avisados quedáis:

Lo malo (y lo bueno) de ver las películas, o al menos algunas de ellas, mucho después de su estreno es que se te olvida casi todo lo que leíste en su día sobre ellas, lo que viste y hasta quién era su director. Si me hubiese acordado de que era Alexander Payne el que estaba tras Los Descendientes me habría dado alguna pista. (O de que Alexliam tituló su crítica en Cine en Serio «La realidad explotando en tu cara».)

Tampoco me acordaba del tráiler, aunque de haberlo hecho tampoco habría sido de ayuda. Éste es uno de esos casos en los que el tráiler no se corresponde demasiado con la película que promociona. (1) El avance que he puesto arriba (aquí con subtítulos) vende una comedia. Y Los Descendientes, de comedia, salvo algún detalle puntual, tiene bien poco.

Ya sé que la premisa inicial «esposa/madre en coma» no es precisamente optimista, pero hay muchas maneras de dulcificar o atenuar ese marco general. Payne prefiere ignorar esos métodos y cualquier otro atajo que aligere la historia. Los pocos y breves respiros cómicos del relato vienen siempre contrarrestados con una dosis de esa realidad que te explota en la cara. Pese a la escasa verosimilitud de alguna de las subtramas (2), Los Descendientes me gustó bastante. Fue interesante ver al personaje al que interpreta George Clooney contemplar cómo su vida entera se desmorona sin que (casi) nunca pierda los nervios y le parta la cara a más de uno que pasa por la historia pidiendo una paliza a gritos. También fue interesante ver cómo va evolucionando su relación con su hija mayor, cómo se van apoyando el uno en el otro para mantenerse en pie y, de paso, mantener también en pie a la hija pequeña.

Aunque ya digo que me gustó, no fue una experiencia agradable. De hecho, no creo que vuelva a verla. Si llego a saber que la mujer del protagonista se pasa toda la película en coma, que va a haber numerosos (e innecesarios) primeros planos de dicha mujer en coma, que voy a ver a su familia despedirse de alguien que obviamente ya no está allí y también cómo esperan en la habitación del hospital a que muera… Bueno, si hubiese sabido todo eso me la habría ahorrado. Ya he visto esa película. Sólo que en mi versión no salía George Clooney.

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(1) No sé si calificar éste como tramposo o equívoco. En la primera categoría podríamos situar los de Star Trek Into Darkness, con los que J. J. Abrams volvió a quedarse con el respetable, contando, a propósito, algo muy diferente a lo que veríamos en la película. En la segunda estarían los tráilers que también cuentan otra peli pero no tienes claro si ha sido a propósito, una pifia del montador o una chunguez cuyo fin último no termina de quedar claro. En esta categoría entran de lleno muchos de los traílers de las pelis de M. Night Shyamalan, tanto el que te vende una peli de monstruos que no es como el que te vende una de extraterrestres que tampoco es. No recuerdo muy bien qué era lo que vendía el de El protegido, pero fijo que tampoco tenía nada que ver con la peli. 

(2) Seamos serios: ninguna mujer engañaría a George Clooney con este tipo. «Es que no estaba nunca en casa y me sentía sola». Vamos a ver, señora, su marido es George Clooney. Párese a reflexionar sobre ese dato antes de pensar en engañarle con un tipo que ni siquiera juega en su misma liga. Seguro que se da cuenta solita de la estupidez de su planteamiento.