Recortes de prensa

Hace unos días me dio por poner orden en las pilas de periódicos que traje conmigo cuando me mudé hace casi cuatro años y que ya llevaban en casa de mis padres unos cuantos años más. En su momento me limité a empaquetarlos y trasladarlos, y desde entonces han estado en casa sin que me haya acordado de ellos. El otro día les metí por fin mano.

Siempre es algo raro revisar al cabo de los años recortes de periódicos y revistas que ni sabes muy bien por qué guardaste en su día, pero es aún más raro cuando muchos de esos recortes llevan tu firma.

Lo primero que me vino a la mente fue el clásico cualquier tiempo pasado fue mejor. Entonces estaba en otra redacción, con otros compañeros (de los que sólo unos cuantos siguen allí) y tenía un trabajo en muchos sentidos mejor que el que tengo ahora. Había, como siempre, una buena cuota de cosas que había que hacer, pero salvo eso podía escribir casi de lo que me apeteciese, tenía un jefe que me dejaba tiempo para que lo hiciera y unos estupendos diseñadores dispuestos a embellecer mis disparates. [Desde cierto punto de vista, ahora también tengo bastante libertad, pero la cuota obligatoria es notablemente mayor. Si quiero escribir algo o hacer algo que vaya más allá de editar teletipos tengo que hacerlo en mi tiempo libre, y ahora ya no me apetece tanto escribir en casa para el periódico como entonces]

Cuando se fue la nostalgia pensé en todo el tiempo perdido que representaba aquella montaña de papel, en los días enteros que pasé en aquella redacción, de la mañana a la madrugada (por las mañanas escribía los reportajes para Cultura, comía en el chino de abajo y por la tarde-noche hacía el Cierre del periódico, y así día tras día), en el trabajo en casa durante los días de descanso y en que ese camino que al principio recordaba con agrado no fue en realidad tan fácil (tampoco es plan de remover todo aquello). Y todo para nada, para escribir cosas que probablemente nadie leyó.

Después, releyendo esas páginas, vi que algunas no estaban del todo mal, y que incluso podría recuperar algunas de ellas aquí (como ya hice en su momento con el perfil de Arthur Conan Doyle, con los reportajes sobre Star Trekuno y dos– o los de Indy –uno y dos-), así que espero que no os importe que los rescate para irlos publicando durante el verano, con la esperanza de que alguien, esta vez, se los lea. Y si no, al menos para que el blog se actualice mientras estamos de vacaciones…

4 comentarios sobre “Recortes de prensa

  1. Más bien eras tú la que ponía letras a las idas de olla de aquellos diseñadores… 😉

    «Y todo para nada, para escribir cosas que probablemente nadie leyó.» Epic fail! No sólo te leíamos, sino que te esperábamos en cada estreno (también esperábamos al crítico del periódico, pero con otras intenciones más aviesas…).

    ¿Qué habrá sido del chino de abajo? ¿Y del Altea? ¿Habrán subsistido sin sus clientes 'más fieles'?

    Me gusta

  2. No, qué va. Eráis vosotros los que mejorábais mis a paridas 😉 Y ya sé que tú eras uno de mis ¿dos, tres? lectores, y una vez más te doy las gracias, por eso y por todo lo demás. No sé si la Altea y el chino habrán sobrevivido (aunque los chinos siempre lo hacen), pero la última vez que pasé por allí el edificio nuestro era una estructura sin nada en su interior. Muy simbólico.

    Me gusta

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.