Aun a riesgo de convertirme en una pesada monotemática, voy a hablar un poquito más del primer tráiler de Indy, porque gracias a él hemos aprendido que en un producto calificado como apto para todos los públicos no se puede mostrar al Ejército norteamericano apuntando con un arma a un compatriota.
¿De qué hablo? De que una de las imágenes del tráiler norteamericano ha sido retocada para que los soldados que le rodean la primera vez que vemos al arqueólogo no le apunten, como sí hacen en el filme y en el tráiler que se ha distribuido en el resto del mundo.
El cambio no ha sido, obviamente, idea de Spielberg o Lucas, sino de la implacable MPAA (Motion Picture Association of America), antaño reino del difunto Jack Valenti y que califica las películas y también sus anuncios, sean en el soporte que sean. Y parece ser (no existe un manual de calificaciones, al menos conocido, en el que se indique qué cosas se pueden mostrar y cuáles no en cada categoría) que lo de ver a soldados americanos apuntando a otro americano no es apropiado para los niños. No me gusta la idea (ni mucho menos la práctica) de la censura, pero por lo menos esta vez ha servido para que le quiten a Indy unos cuantos rifles de encima. Algo es algo.
P. D.: En el tráiler internacional también ha desaparecido una bandera de Estados Unidos que cruza la pantalla como transición entre el recuerdo de las anteriores aventuras y las imágenes de la nueva, aunque la verdad es que no sé qué aporta el cambio.