Ayer, buscando cosas sobre El hombre tranquilo, me topé con un divertido vídeo que, usando imágenes de la película, ofrece una especie de manual sobre cómo debe un hombre tratar a las mujeres. Quien haya visto la película sabrá que el modo en que John Wayne trata a Maureen O’Hara es de todo menos apropiado a los tiempos que corren, marcados por la corrección política (y a veces encadenados a ella) y en los que hay que tener mucho cuidado con lo que se escribe, habla o proyecta en cine y televisión para no ofender la delicada sensibilidad de los guardianes del decoro, la decencia y la corrección.

Habrá alguno que enseguida piense en «los americanos», pero no hablo de ellos, sino de nuestros propios idiotas autóctonos, que raudos denuncian cuanto anuncio, serie, programa o película pueda, aunque sea remotamente, herir la sensibilidad de unos espectadores a los que todas estas cosas les importan bastante poco, porque no por mucho cuidar la programación televisiva van a dejar de matar a sus esposas, novias o ex esos animales que, día sí, día también, engrosan la lista de víctimas de la (mal)llamada violencia machista, doméstica o de género. Ni siquiera merecen el esfuerzo de inventar un nombre para lo que ellos hacen.

Sin más dilaciones, que me disperso, os dejo con La guía de John Wayne para un matrimonio saludable y sigo más abajo.

Como la cosa va hoy de atar cabos y completar tareas a medias, incluyo también dos vídeos curiosos que me dejé atrás cuando hablé del avance de la nueva aventura de Star Trek que prepara J. J. El primero es una promo funky (lo dicen ellos) de la edición en DVD de la serie (la original, claro),

y el segundo un extraño pero divertido cruce entre la tripulación del Enterprise y los Monty Python (concretamente Los caballeros de la mesa cuadrada).