Aparte de que se te puede llenar el ordenador de virus si no tienes cuidado con lo que descargas (al menos eso es lo que te dicen en el servicio técnico cada vez que llamas porque tienes un problema con el ADSL) y de que te pueden meter un buen paquete si te pillan las celosas autoridades que velan por los derechos de la propiedad intelectual (esas mismas que nos cobran de más por CD, DVD y otros soportes y que nunca hicieron nada contra las redes de venta de cassettes piratas), hay otras cosas que te pueden pasar si cometes el terrible pecado de ceder a la tentación de la piratería.
Corrección: Mi novio me informa de que las autoridades sí que intervinieron en su día contra la piratería de cassettes, aunque en mi infancia los mercadillos de la Costa del Sol estaban plagados de puestos (nada de mantas en el suelo, puestos con sus mesas, toldos y demás) donde podías comprar casi todo lo que había en el mercado.